«Espero que todo joven escritor –o, para el caso, todo escritor mayor– que ande buscando un maestro para tomar impulso, un maestro que, al final, no pueda enseñarle realmente nada más que el fuego, encuentre algo de provecho en estas páginas.»
Cuando leemos historias y quedamos fascinados con ellas es muy probable que sintamos una chispa que nos impulse a querer escribir las nuestras. Todos tenemos una historia que contar o somos el receptáculo de muchas historias que nos han compartido. Pero, ya frente a la pantalla del ordenador o con el cuaderno abierto, no tenemos idea de cómo comenzar nuestra narración, y cuando por suerte lo logramos, nos perdemos en el camino y no sabemos por dónde retornar. El final perfecto que en nuestra mente era como un sueño, ahora lo vemos inalcanzable, se convierte en una pesadilla. ¡Qué bien nos caerían unos consejos! Y este libro es precisamente un compendio de consejos para el terror de una página en blanco.
Colum McCann es un escritor nacido en las tierras de James Joyce, Dublin. Ha escrito varias novelas y colecciones de relatos, en los que cabe destacar Perros que cantan, Transatlántico y Un país donde todo debe morir. Su talento como escritor no ha pasado desapercibido y ha obtenido reconocimientos y galardones, lo que lo ha convertido en uno de los escritores irlandeses más destacados de la actualidad, aunque también es importante mencionar que ha logrado algunos premios en el extranjero. Actualmente vive en New York. Consciente de las dificultades que algunas personas tienen al escribir y con el peso de la experiencia en su pluma, nos trae este libro que no solo es práctico y directo, sino didáctico y ameno.
50 Consejos para ser escritor no es un libro dedicado exclusivamente a escritores. Cualquier persona cuya profesión le obligue a tener entregables escritos encontrará en esta obra un tesoro. El libro tampoco es un tratado o un largo ensayo explicando cada consejo, los orígenes, las analogías, ejemplos y todo eso que podría hacer del libro algo mucho más técnico, pesado e incluso con un cariz universitario. Es una guía, un manual, un auxilio que todo escritor no importa si es novato o no, desea tener en manos en aquellos momentos donde somos invadidos por bloqueos. McCann es muy ejecutivo, cada consejo tiene a lo sumo ocho páginas, en promedio cuatro. Por mi parte trataré de ser todavía más ejecutivo y resumiré cada consejo en una línea. No obstante, si te es posible y quedaste interesado, recomiendo que busques el libro y lo tengas en tu biblioteca personal.
- No hay reglas: solo las gramaticales y las de ortografía.
- Tu primera frase: debe enganchar, ser profunda como un disparo.
- No escribas de lo que sabes: investiga, estudia y complementa.
- El terror a la página en blanco: se vence escribiendo no procrastinando.
- Sin música no hay ideas: siente al mundo en la música, inspírate.
- Un héroe de la consciencia: el héroe es el lector, haz que lo sienta.
- De la nada, la creación de personajes: inspírate en personas reales que conozcas.
- Perfilando la verdad: se honesto, autentico y verosímil.
- Lleva un cuaderno: o una grabadora, toma apuntes, son espontáneos.
- Sé una cámara: ten perspectiva, aplica filtros, fíjate en los detalles.
- Olvídalo, escribir diálogos: modera los diálogos, evítalos si son falsos.
- Lee en voz alta: siente la sonoridad y cadencia de tus palabras.
- Quién qué dónde cuándo cómo y por qué: ¿Quién cuenta la historia? ¿Qué sucede? ¿Dónde están? ¿Cuándo, en qué momento? ¿Cómo se relaciona todo? ¿Por qué se cuenta la historia?
- En busca de la estructura: sino planificas, escribe y reorganiza muchas veces.
- Lo que importa, el lenguaje y la trama: como se cuenta es más importante que lo que se cuenta.
- Puntuación, no es algo prescindible (la coma): cuidado con la ortografía. Aprende a usar la coma.
- Investigación, Google es demasiado superficial: elige bien tus fuentes.
- Nada de frases trilladas, por favor: medita las frases que escribes.
- El hábito de esperar: evita obviedades por ir deprisa.
- Las Olimpiadas literarias no existen: es la calidad y no la cantidad.
- ¿Qué edad tiene el joven escritor?: la edad no hace al escritor.
- No seas capullo: se amable, no fanfarronees.
- Pero tampoco seas demasiado amable (no al menos en tu ficción): no crees personajes moralmente perfectos.
- Fracasa, fracasa, fracasa: el fracaso es el otro nombre de la experiencia.
- Lee, lee, lee: y nunca dejes de leer.
- Rejoyce: relee a Joyce o su equivalente hispanohablante, Borges.
- La escritura es entretenimiento: crea arte, no un mundo en blanco y negro.
- Tómate un descanso: en medio de la escritura, para aclarar ideas.
- ¿Quién es tu lector ideal?: TÚ. Aprende a criticarte.
- ¿Cómo conseguir agente?: investiga con escritores jóvenes o primerizos.
- ¿Qué pasa si no consigo agente?: prueba con editoriales locales y revistas.
- En busca del editor adecuado: si lo encuentras, cuídalo y valóralo.
- Sobre cómo leer tus relatos con una mirada fresca: deja pasar una o dos semanas y lee tu relato.
- Tíralo todo: sino te gusta, empieza de nuevo, desde cero.
- Permite la inteligencia del lector: no seas tan indulgente, al lector le gustan los retos.
- Éxito: es efímero. No bajes la guardia y trabaja.
- Si has terminado, es que sólo acabas de empezar: publicar es un largo proceso.
- Las reseñas de las solapas (o el arte del porno literario): son mentirosas, difíciles y necesarias.
- Una escucha secreta: escribe hasta que encuentres la voz del relato.
- ¿Dónde escribir?: obvio, en un lugar cómodo.
- Estudiar un máster o no: no es inútil, pero tampoco te hará mejor escritor.
- ¿Debería leer mientras escribo?: siempre.
- Destroza ese espejo: respeta tu privacidad, la de tu familia y amigos.
- Los perros oscuros de la cabeza: escribir es terapéutico, libera tus demonios.
- Escríbete un credo: tu decálogo como escritor.
- La teoría del autobús: escribir debe tener un propósito, no debe ser un capricho.
- ¿Por qué contar historias?: para crear lo que no existe.
- Abraza a los críticos: se receptivo, no lo tomes personal.
- Llega exhausto al final: haz tu mayor esfuerzo cuando escribas.
- Tu última frase: que sea memorable. Escribe varias y elige.
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